Testimonial
Flor ( Argentina )
Saturday, March 31, 2018 07:32:04 pm
Llegue a La Habana un 19 de diciembre luego de tres meses fuera de mi país y gracias a esas cosas lindas de la vida o el destino la primer casa que pisé fue la de Mercedes e Irina. Cuando uno está lejos de casa por un tiempo, ya sea corto o largo, se extrañan esos pequeños detalles que a veces cuesta ver en la vida cotidiana, en la tempestiva cotideaneidad que vivimos.
Con una enorme sonrisa salió Mercedes al balcón y me gritó "Ya llegaste Flor!", así como si nos conociéramos de toda la vida. Entrar a su casa fue entrar a un hogar con todo lo que eso implica: preguntas sobre el viaje, sobre mi país, si había comido o si deseaba un café... El viajero me va a entender que esas preguntas son caricias al alma SIEMPRE...
De mis 28 días en Cuba casi 15 fueron compartidos con Merci, Irina y Nati... mi nueva familia cubana. Solidaridad, hospitalidad, amabilidad, respeto, alegría, amor son sólo algunas de las palabras que describen esta hermosa familia y digo "sólo" porque me resulta muy difícil describir en simples palabras todo lo que me brindaron durante ese tiempo...
Iri con sus mil actividades siempre haciéndose un tiempo para golpearme y preguntarme como estaba, como había ido el día o si había hablado con mi familia... Siempre sonriente y dispuesta a ayudarme en mis próximos pasos...
Merci es nada mas ni nada menos que mi nueva abuela: me dibujo cada plano para que yo llegue a los puntos de toda la ciudad, no me dejaba salir sin desayunar, me cocinaba con ese amor de abuela que es único, me contaba todas sus historias a la vez que me escuchaba y valoraba mis opiniones, me lleno de sonrisas, abrazos y no dudó jamas en compartir mis queridos "mates", que según sus palabras ahora si entendía como el Che extrañaba tanto dicha tradición argentina.
Y como ya eramos FAMILIA tuve la grata oportunidad de festejar el cumpleaños numero 81 de Mercedes, en donde una vez mas como desde que llegue me sentí como en casa.
Hoy ya hace dos meses que volví a Argentina y mas de una noche me encantaría estar sentada al lado de Mer mirando la novela y que me pida que caliente el agua para tomar unos mates, ya que de los mates siempre comenzaban esas charlas llenas de historias y consejos... Estoy segura que eso ocurrirá porque Cuba me enamoró y me fui prometiendo volver!
El consejo mas sincero es ir a Cuba y conocerlo a través de uno mismo, despojándose de los medios de comunicación y de todo lo que se pueda decir afuera... Vivir Cuba es una experiencia maravillosa en sus calles y en su gente y nadie debería perderse dicha experiencia... Y si en Cuba uno se encuentra con Mer e Iri no hay dudas que todo va a ser mas perfecto aun!
VIVA CUBA !
Con una enorme sonrisa salió Mercedes al balcón y me gritó "Ya llegaste Flor!", así como si nos conociéramos de toda la vida. Entrar a su casa fue entrar a un hogar con todo lo que eso implica: preguntas sobre el viaje, sobre mi país, si había comido o si deseaba un café... El viajero me va a entender que esas preguntas son caricias al alma SIEMPRE...
De mis 28 días en Cuba casi 15 fueron compartidos con Merci, Irina y Nati... mi nueva familia cubana. Solidaridad, hospitalidad, amabilidad, respeto, alegría, amor son sólo algunas de las palabras que describen esta hermosa familia y digo "sólo" porque me resulta muy difícil describir en simples palabras todo lo que me brindaron durante ese tiempo...
Iri con sus mil actividades siempre haciéndose un tiempo para golpearme y preguntarme como estaba, como había ido el día o si había hablado con mi familia... Siempre sonriente y dispuesta a ayudarme en mis próximos pasos...
Merci es nada mas ni nada menos que mi nueva abuela: me dibujo cada plano para que yo llegue a los puntos de toda la ciudad, no me dejaba salir sin desayunar, me cocinaba con ese amor de abuela que es único, me contaba todas sus historias a la vez que me escuchaba y valoraba mis opiniones, me lleno de sonrisas, abrazos y no dudó jamas en compartir mis queridos "mates", que según sus palabras ahora si entendía como el Che extrañaba tanto dicha tradición argentina.
Y como ya eramos FAMILIA tuve la grata oportunidad de festejar el cumpleaños numero 81 de Mercedes, en donde una vez mas como desde que llegue me sentí como en casa.
Hoy ya hace dos meses que volví a Argentina y mas de una noche me encantaría estar sentada al lado de Mer mirando la novela y que me pida que caliente el agua para tomar unos mates, ya que de los mates siempre comenzaban esas charlas llenas de historias y consejos... Estoy segura que eso ocurrirá porque Cuba me enamoró y me fui prometiendo volver!
El consejo mas sincero es ir a Cuba y conocerlo a través de uno mismo, despojándose de los medios de comunicación y de todo lo que se pueda decir afuera... Vivir Cuba es una experiencia maravillosa en sus calles y en su gente y nadie debería perderse dicha experiencia... Y si en Cuba uno se encuentra con Mer e Iri no hay dudas que todo va a ser mas perfecto aun!
VIVA CUBA !